Si lleváis ya algún tiempo dentro del coleccionismo de figuras, el término «Santo Grial» seguro que os suena. Se usa mucho, me atrevería a decir que demasiado y sin pensar si quiera si se hace de manera correcta. Esto hace que el concepto se vaya diluyendo con el paso del tiempo y su significado se aleje de su origen. Hoy creo que es el momento de intentar explicar qué es un Santo Grial del coleccionismo y cómo creo que deberíamos usar este término.
Qué es el Santo Grial
Según cuentan algunas fuentes, el Santo Grial es la copa que usó Jesucristo en la última cena. A día de hoy, su existencia sigue siendo un misterio, así que destaca por ser un objeto único. Su valor es incalculable, pero lo que nos interesa es ¿Cómo se aplica este concepto al coleccionismo de figuras?

Yo lo escuché (o leí, mejor dicho) por primera vez en los foros americanos, cuando se referían a esa pieza especial de una colección como Holy Grail. Pero siempre se refería a una sola pieza, aquella más especial, y tiene sentido ya que solo existió un Grial.
Pero a medida que este término se fue popularizando, la gente lo empezó a usar un tanto a la ligera. Sin temor a llamar Grial a figuras que no tiene ningún sentido que reciban ese calificativo. Obviamente, cada uno puede llamar a las cosas como quiera, pero creo que un Santo Grial debe ser una pieza única y sobre todo que destaque por su rareza, por lo complicada que es de conseguir.
Santo grial se usa demasiado y muy mal
Pese a que hay muchas situaciones en las que creo que se usa este calificativo de manera incorrecta, creo que hay dos problemas principales que la gente confunde de manera recurrente.
No hay 50 griales en una colección
Es muy común estar leyendo y ver que dicen «esta figura es un grial» o «esta figura es un Santo Grial», pero cada vez lo leerás de una figura distinta. Entonces, ¿Tenemos 50 griales en cada colección?
La respuesta es no. Con el paso del tiempo hay figuras que se han convertido en piezas menos comunes y más complicadas de conseguir, pero eso no quiere decir que debamos referirnos a ellas como griales. Son simplemente figuras que la gente busca más, que ha habido menor producción o que se ponen de moda por algún motivo, nada más.

Aunque a mi no me gusta para nada usar este concepto, en caso de usarlo entiendo que hay que reservar este «honor» a piezas prácticamente únicas, muy difíciles de conseguir y que tienen algo que no tiene el resto.

Caro no es sinónimo de Santo Grial
Otro de los motivos es el tema de los precios. Que algo sea caro, no significa que sea raro o difícil de conseguir y, por tanto, no sería un grial. Hay gente que argumenta, con sentido, que el que una figura sea cara la hace más inaccesible, pero creo que con eso no es suficiente.
El precio puede venir marcado por mil motivos. Tal vez salió en un momento de demanda más baja, porque los scalpers arrasaron el día de su lanzamiento o simplemente por puro marketing. Un caso muy común es el de el gato Scratch, una figura que si buscas en páginas de compra-venta siempre vas a encontrarla disponible y seguramente varias unidades. ¿Es complicada de conseguir? No, pero es cara, muy cara.

Así que no hay que confundir precio con rareza, que a veces van de la mano, pero no siempre. El mundo del coleccionismo tiene detrás un mercado de segunda mano muy podrido que algunos manejan a su antojo haciendo subir o bajar el precio de aquellos artículos que les interesa.

Por muy raro que sea algo, se puede conseguir
Hay muchas maneras de hacerte con una de estas piezas antológicas. Una de ellas y, seguramente, la más simple, es sacar la billetera y listo. Otra es esperar, ser paciente y si se da la oportunidad, aprovecharla.
Y esto, aunque parezca que no, puede pasar. Hace muchos años, encontré en una web una figura de la serie Next Mutation, llamada Don’s Camo Hydro Skimmer. Lo que podríamos considerar el santo grial de esa colección y una figura muy complicada de conseguir porque no hay muchas. Pues bueno, allí estaba por 30€ y, a pesar de que pensaba que se trataba de una estafa, me llegó a casa sin problemas.

Conclusión
Como he dicho, no me gusta usar el término Santo Grial para nada, pero entiendo que haya gente a la que le mole muchísimo hacerlo para darle ese toque místico o especial a algunas piezas. Pero hay que hacerlo con conocimiento de causa y no ir al tun tun usándolo a diestro y siniestro ya que esto lo que hace es confundir al personal.
No podemos decir que es un grial una figura de 2016 simplemente porque ha duplicado su precio y me ha costado un mes encontrarla en un portal de artículos de segunda mano. Un grial debe ser algo único, algo especial por el motivo que sea y, sobre todo, que sea prácticamente imposible que lo puedas tener en tu colección.
